(VÍNCULOS OCULTOS)
Administran páginas web en contra del Gobierno Nacional. Muchos de ellos dicen ser apartidarios pero tienen fuertes vínculos con la oposición. Reniegan de contestar preguntas a la prensa y muchos incentivan a los manifestantes a que no lo hagan. Quienes son?
Están detrás de 8N y constantemente invitan a sus "fanáticos" a participar de las protestas en contra del Gobierno Nacional. Día a día su contenido llega a miles de personas y ya suman 45 las páginas que se volvieron influyentes en sectores reacios al gobierno kirchnerista. Lejos de que la próxima manifestación sea espontánea, paso a paso eligieron estrategicamente el día. Sin embargo las contradicciones internas entre ellos ya está haciendo mella en el movimiento.
Quienes son
Uno de los grupos que avala estas marchas es el que se denomina “La democracia en peligro, digamos basta por favor”. Su creador, Juan Manuel Cheddad, está muy lejos de ser apartidario. Es concejal por el radicalismo en General Arenales. En diálogo con Infonews opinó que "en gran parte este Gobierno es una dictadura". También creyó que Mauricio Macri es "el mejor candidato de la oposición" para enfrentar al candidato kirchnerista en las elecciones presidenciales de 2015.
Por otra parte, se encuentra, Lucho Bugallo, de 31 años, oriundo de Ascensión, un pueblo rural bonaerense - . Es un lazo clave de los caceroleros con dirigentes de la oposición. Cuando se encontraba en su pueblo natal formaba parte de la Federación Agraria y ahora que vive en Buenos Aires se sumó a la Sociedad Rural. Bugallo colabora con El Cipayo (17.083 adherentes), página que es una de las referentes. "No queríamos cometer errores anteriores de convocar a la semana o a los quince días, porque la gente se cansa o aburre”, dijo.
Marcelo Bustos, 32 años, forma parte de Ciudadanía Activa. "Pensamos hacer remeras y venderlas para que la gente las lleve al cacerolazo", dijo sobre la convocatoria para el N8. Dice que su intención es trascender la queja y que buscan permanentemente "pasar a una acción más concreta".
Por Paz Rodriguez Niell | LA NACION
El cacerolazo del 13 de septiembre fue el mayor éxito de los ciberactivistas. Foto: LA NACION / F. MassobrioSentados en el living de un cuarto piso en un departamento del centro, siete personas llevaban dos horas debatiendo si era mejor el 8 o el 15. "Ya lo largaron. Tiraron el 8", anunció un joven mirando su celular. La discusión se terminó. La página Yo no voté a la Kretina y Usted? lo había resuelto. Había anunciado la fecha del próximo cacerolazo, lo que pocas horas más tarde sería el 8-N. Los siete estaban enojados porque el acuerdo era que lo decidirían entre todos. Ahora sólo quedaba acompañar.
Todos los participantes de ese cónclave son administradores de páginas de Facebook que, entusiasmados por el éxito del 13-S, trabajan hoy desde sus casas, sus trabajos y sus teléfonos celulares en volver a reunir adeptos; esta vez, para noviembre. Aquella noche definieron la consigna: "Basta" y lanzaron los primeros volantes a la Web, obra de un diseñador que jamás reveló su identidad.
Aunque evitan identificarse como "organizadores", lo cierto es que detrás de los cacerolazos existe una organización. Gente que se conoce, que se reúne periódicamente, que está siempre en contacto y que ya tiene sus propias disputas y celos. Algunos hablan abiertamente, pero la mayoría sólo acepta comunicarse desde el teclado. Sí o no a la exposición pública es uno de los motivos de pelea.
En los últimos cuatro meses fijaron consignas que se juraron respetar a rajatabla; la primera, que las protestas deben ser apartidarias. Eso incluye que ningún partido va a capitalizar -en lo que de ellos dependa- las movilizaciones ni decidir qué harán, pese a que varios administradores admiten haberse reunido con opositores como Elisa Carrió y Patricia Bullrich, y haber escuchado sus consejos. Algunas veces los siguieron y otras no, cuentan, como cuando Bullrich les recomendó como fecha concentrarse en el 10 de diciembre.
Las páginas y grupos vinculadas a los cacerolazos son cerca de 45 y su contenido llega a decenas de miles de personas. Los administradores de los más representativos repiten que no tienen líderes y que son difusores de un movimiento que los excede.
La conexión entre ellos empezó en el cacerolazo del 14 de junio, relatan. Días después se hizo la primera reunión, en una oficina de la avenida Córdoba. "Fui a Santa Fe y Callao y ahí tomé contacto con varios que hasta ese momento sólo conocía de Internet", cuenta Marcelo Morán, administrador de El Anti K, una página con más de 42.900 adherentes, es decir, personas que le dieron click a "me gusta" en la página y reciben todo lo que él postea. Según Morán, ese número crece de a 500 en cada discurso de la Presidenta. "Sin que hagamos nada. Ella habla y se dispara", cuenta Morán. Es abogado y vive en San Miguel. Está de novio con Mariana Torres, a quien conoció en la página No a la renuncia de Julio Cobos, también creada por él. En estos días, ella coadministra El Anti K.
Mariana Torres y Mariano Morán, dos militantes de la Web. Foto: LA NACION / S. Aznarez"La cibermilitancia es muy valorada hoy. Nosotros hacemos política, pero no somos como los militantes de los partidos. Ellos son fanáticos. Yo no me caso con nadie", dice Torres, contadora. En 2011 votó a Carrió.
"En los 70 pintábamos con cal y negro humo y hoy usamos Facebook", replica, desde la otra vereda, Jorge Ottone, un personaje temido por los administradores antikirchneristas. Él, que tiene en su perfil una foto con la Presidenta, responde al vicegobernador Gabriel Mariotto y fue funcionario de la Secretaría General de la provincia. Ahora se trenza todos los días en alguna pelea. "No me importan las cacerolas, aunque sean un millón, el tema es cómo se transforma eso en política real, que requiere votos. Los caceroleros tienen derecho a expresarse, pero van a estar en un problema porque su líder, el unificador de sus ideas, Jorge Lanata, no va a ser candidato", dice, provocador.
En efecto, todos los administradores consultados coincidieron en que nadie aglutina como Lanata.
A los opositores, en general, los evitan. "La protesta también es para la oposición, instándolos a que se pongan de pie", dijo a LA NACION uno de los administradores de una de las páginas más grandes.
Admiten, no obstante, que tienen diálogo con dirigentes de muchos de los partidos opositores, como Pro, la Coalición Cívica y el peronismo federal, y que dirigentes del macrismo, por ejemplo, se contactaron para decirles que acompañarán el 8-N.
Hay acuerdo en que nadie llevará identificaciones partidarias y los políticos caminarán mezclados entre la gente. "La cosa crece y es normal que empiece a haber reuniones y charlas", dijo a LA NACION Patricia Bullrich. Según ella, "mucha gente" de su partido integra "los grupos que marcan el ritmo de las convocatorias".
A la cabeza de los menos queridos por los ciberantikirchneristas están la Presidenta, Guillermo Moreno y Amado Boudou. En los últimos tiempos, también despertó bronca el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, que afirmó que a los caceroleros del 13-S "les importa más lo que ocurre en Miami que en San Juan". Pero es menos conocido y, por eso, lo que se sube de él provoca menos impacto, dicen los administradores.
"Yo no soy oligarca ni golpista", se quejó Marcelo Bustos, 32 años, de Ciudadanía Activa. Su primera experiencia fue en un escrache a Carlos Menem frente al hotel Presidente, pero dice que su intención es trascender la queja: "Queremos pasar a una acción más concreta". Su agrupación tiene 445 miembros activos en Facebook y reuniones propias.
Por ahora, Bustos dice que está concentrado en el 8-N. "Pensamos hacer remeras y venderlas para que la gente las lleve al cacerolazo", cuenta. Según él, "un mínimo de estrategia" es necesario. Recibe a LA NACION en la inmobiliaria de su familia en la que trabaja, en Palermo, donde siempre está conectado a Facebook y a Twitter. "En el rubro, ahora tengo tiempo", se sonríe.
Bustos, como casi todos los consultados, coincide en que decidieron verse las caras porque Internet tiene fallas. El peligro de ser operados por infiltrados oficialistas (a quienes ellos llaman "kukas") y los problemas para coordinar acciones rápidas fueron los principales factores.
El promotor de los encuentros fue Lucho Bugallo, de 31 años, oriundo de Ascensión, un pueblo rural bonaerense. Es un lazo clave de los caceroleros con dirigentes de la oposición. En Ascensión, estaba en Federación Agraria y cuando se instaló en Buenos Aires se sumó al ateneo de la Sociedad Rural. Hizo un curso en la fundación Fragua, que presidía Max Gulmanelli, actual funcionario del gobierno porteño, e integra Soy Fiscal, organización dedicada a capacitar a fiscales electorales, de la que participa el rabino Sergio Bergman. Bugallo creó Red de Encuentro Ciudadano (REC), con gente de partidos como Unión por Todos y la Coalición Cívica. Todos los martes hacen charlas en la Legislatura porteña.
De los administradores de páginas, los más representativos están divididos en dos facciones, que tienen rispideces, pero mantienen algún nexo. Para coordinar estrategias, los principales administradores tienen otros grupos que no son públicos, donde dialogan sólo ellos.
Bugallo colabora con El Cipayo (17.083 adherentes), página que es una de las referentes. Pero él no es El Cipayo, cuya identidad es un misterio. En lo que a intrigas respecta, el mundo de los ciberopositores está lleno. Identidades falsas, colaboradores secretos, acusaciones de infiltración... Hoy nada de eso importa. Todos se centran en el 8-N. Qué pasará con ellos después es otro misterio.
Marcelo Morán y Mariana Torres, (administradores de El Anti K) son los organizadores principales de las manifestaciones y se encuentran en muchos puntos en desacuerdo con el resto. Morán participó del escrache a Guillermo Moreno, un metodo que fue repudiado por varios de los otros administradores. Además tienen otras diferencas como por ejemplo están en contra de los que proponen no hablar con la prensa, de los contactos con los opositores y de quienes quieren sacar redito económico como por ejemplo con la ventas de las camisetas.
"No milito para ningún partido. Voté a la Coalición Cívica en las últimas elecciones pero me considero independiente. Pienso en cada elección a quién votar. Nadie tiene ni tendrá mi voto cautivo. Fuimos la única página que se mantuvo apartidaria en octubre, o al menos una de las pocas" dijo hace poco Torres en un texto que ella misma difundió y agregó: "No tenemos contacto con ningún opositor. Personalmente, creo que no deben subirse a la protesta. La gente no va por ellos".
Y luego sostuvo: "No tengo ningún microemprendimiento de impresión de remeras. Quiero creer que el comentario que hizo el administrador de un grupo pequeño que habló de hacer remeras, era sólo para ellos".
Que opinan
Desde la agrupación "La Yrigoyen", de origen radical, sostienen que el gobierno de Cristina Kirchner "es una dictadura que llegó con las urnas". Para ellos no hay una división de poderes sino "una propensión a ejercitar arbitrariamente el mando en beneficio de la minoría que la apoya" al Gobierno Nacional.
La agrupación "Argentina Sin Korrupción", también en diálogo con Infonews fue por la misma tesitura. Sostuvo que el gobierno de Cristina "no es una dictadura porque fue elegida democráticamente, pero se maneja como tal en su proceder", ya que "quien no piensa igual es separado, destruído, sofocado" y aseguró que la movilización "no quiere destituir pero sí frenar las malas politicas".
Organización
Es para remarcar una nota aclaratoria realizada por la pagina "Yo no vote a Kretina y Ud?" que permite ilustrar el modus operandi de estos grupos. Ante un artículo de La Nación, publicaron la siguiente salvedad. "La fecha del 8N no fue resuelta por ésta página, sino por un grupo de administradores de no menos de 15 a 20 páginas, entre las que se encuentra la nuestra" dijeron.
No es menor además la relación con los opositores como Elisa Carrió y Patricia Bullrich. Muchos de ellos lo reconocen. Como se sostuvo en un artículo de La Nación, que fue la ex funcionaria de la Alianza quien les recomendó como fecha concentrarse el 10 de diciembre. El ProPeronismo y el macrismo también tiene relación con estos grupos y muchos de ellos hasta forman parte de los mismos.
Pero el vínculo no es solo virtual. "Fui a Santa Fe y Callao y ahí tomé contacto con varios que hasta ese momento sólo conocía de Internet", contó, en una entrevista a la prensa, Marcelo Morán. Según el mismo explicó la conexión entre ellos empezó en el cacerolazo del 14 de junio. Después mantuvieron asiduamente las reuniones.
"La cosa crece y es normal que empiece a haber reuniones y charlas", le confesó a La Nación, Patricia Bullrich, quien también aseguró que "mucha gente" de su partido integra "los grupos que marcan el ritmo de las convocatorias".
Mientras sostienen periódicamente que la próxima marcha es completamente apartidaria y espontánea, lo cierto es que el día fue claramente decidido por los miembros mas influyentes de estos grupos. Es mas muchos de ellos dieron de baja a otras fechas supuestas. Las reuniones continuas y la conexión con políticos opositores claramente es la contracara que muchos no quieren ver del futuro N8.
Fuente:
Diario Registrado. http://www.diarioregistrado. com/politica/66658-que-hay- detras-de-los-organizadores- del-8n.html
http://www.taringa.net/posts/ noticias/14959703/Fogoneo-del- PRO-a-los-cacerolazos-a- traves-de-Internet.html
http://www.lanacion.com.ar/ 1517081-secretos-y- estrategias-detras-de-las- cacerolas
fuente de UPPDAL
monica oporto17:57
Quienes son
Uno de los grupos que avala estas marchas es el que se denomina “La democracia en peligro, digamos basta por favor”. Su creador, Juan Manuel Cheddad, está muy lejos de ser apartidario. Es concejal por el radicalismo en General Arenales. En diálogo con Infonews opinó que "en gran parte este Gobierno es una dictadura". También creyó que Mauricio Macri es "el mejor candidato de la oposición" para enfrentar al candidato kirchnerista en las elecciones presidenciales de 2015.
Por otra parte, se encuentra, Lucho Bugallo, de 31 años, oriundo de Ascensión, un pueblo rural bonaerense - . Es un lazo clave de los caceroleros con dirigentes de la oposición. Cuando se encontraba en su pueblo natal formaba parte de la Federación Agraria y ahora que vive en Buenos Aires se sumó a la Sociedad Rural. Bugallo colabora con El Cipayo (17.083 adherentes), página que es una de las referentes. "No queríamos cometer errores anteriores de convocar a la semana o a los quince días, porque la gente se cansa o aburre”, dijo.
Marcelo Bustos, 32 años, forma parte de Ciudadanía Activa. "Pensamos hacer remeras y venderlas para que la gente las lleve al cacerolazo", dijo sobre la convocatoria para el N8. Dice que su intención es trascender la queja y que buscan permanentemente "pasar a una acción más concreta".
Secretos y estrategias detrás de las cacerolas
Son administradores de páginas de Internet, que organizaron las protestas del 13 de septiembre y agitan otra para el 8 de noviembre; reniegan de los políticos, pero tienen lazos con opositoresPor Paz Rodriguez Niell | LA NACION
Todos los participantes de ese cónclave son administradores de páginas de Facebook que, entusiasmados por el éxito del 13-S, trabajan hoy desde sus casas, sus trabajos y sus teléfonos celulares en volver a reunir adeptos; esta vez, para noviembre. Aquella noche definieron la consigna: "Basta" y lanzaron los primeros volantes a la Web, obra de un diseñador que jamás reveló su identidad.
Aunque evitan identificarse como "organizadores", lo cierto es que detrás de los cacerolazos existe una organización. Gente que se conoce, que se reúne periódicamente, que está siempre en contacto y que ya tiene sus propias disputas y celos. Algunos hablan abiertamente, pero la mayoría sólo acepta comunicarse desde el teclado. Sí o no a la exposición pública es uno de los motivos de pelea.
En los últimos cuatro meses fijaron consignas que se juraron respetar a rajatabla; la primera, que las protestas deben ser apartidarias. Eso incluye que ningún partido va a capitalizar -en lo que de ellos dependa- las movilizaciones ni decidir qué harán, pese a que varios administradores admiten haberse reunido con opositores como Elisa Carrió y Patricia Bullrich, y haber escuchado sus consejos. Algunas veces los siguieron y otras no, cuentan, como cuando Bullrich les recomendó como fecha concentrarse en el 10 de diciembre.
Las páginas y grupos vinculadas a los cacerolazos son cerca de 45 y su contenido llega a decenas de miles de personas. Los administradores de los más representativos repiten que no tienen líderes y que son difusores de un movimiento que los excede.
La conexión entre ellos empezó en el cacerolazo del 14 de junio, relatan. Días después se hizo la primera reunión, en una oficina de la avenida Córdoba. "Fui a Santa Fe y Callao y ahí tomé contacto con varios que hasta ese momento sólo conocía de Internet", cuenta Marcelo Morán, administrador de El Anti K, una página con más de 42.900 adherentes, es decir, personas que le dieron click a "me gusta" en la página y reciben todo lo que él postea. Según Morán, ese número crece de a 500 en cada discurso de la Presidenta. "Sin que hagamos nada. Ella habla y se dispara", cuenta Morán. Es abogado y vive en San Miguel. Está de novio con Mariana Torres, a quien conoció en la página No a la renuncia de Julio Cobos, también creada por él. En estos días, ella coadministra El Anti K.
Mariana Torres y Mariano Morán, dos militantes de la Web. Foto: LA NACION / S. Aznarez"La cibermilitancia es muy valorada hoy. Nosotros hacemos política, pero no somos como los militantes de los partidos. Ellos son fanáticos. Yo no me caso con nadie", dice Torres, contadora. En 2011 votó a Carrió.
"En los 70 pintábamos con cal y negro humo y hoy usamos Facebook", replica, desde la otra vereda, Jorge Ottone, un personaje temido por los administradores antikirchneristas. Él, que tiene en su perfil una foto con la Presidenta, responde al vicegobernador Gabriel Mariotto y fue funcionario de la Secretaría General de la provincia. Ahora se trenza todos los días en alguna pelea. "No me importan las cacerolas, aunque sean un millón, el tema es cómo se transforma eso en política real, que requiere votos. Los caceroleros tienen derecho a expresarse, pero van a estar en un problema porque su líder, el unificador de sus ideas, Jorge Lanata, no va a ser candidato", dice, provocador.
En efecto, todos los administradores consultados coincidieron en que nadie aglutina como Lanata.
A los opositores, en general, los evitan. "La protesta también es para la oposición, instándolos a que se pongan de pie", dijo a LA NACION uno de los administradores de una de las páginas más grandes.
Admiten, no obstante, que tienen diálogo con dirigentes de muchos de los partidos opositores, como Pro, la Coalición Cívica y el peronismo federal, y que dirigentes del macrismo, por ejemplo, se contactaron para decirles que acompañarán el 8-N.
Capital Federal. Miles de personas se agruparon en los principales centros demográficos para manifestarte contra el Gobierno. Foto: LA NACION / Sebastián Rodeiro
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A la cabeza de los menos queridos por los ciberantikirchneristas están la Presidenta, Guillermo Moreno y Amado Boudou. En los últimos tiempos, también despertó bronca el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, que afirmó que a los caceroleros del 13-S "les importa más lo que ocurre en Miami que en San Juan". Pero es menos conocido y, por eso, lo que se sube de él provoca menos impacto, dicen los administradores.
"Yo no soy oligarca ni golpista", se quejó Marcelo Bustos, 32 años, de Ciudadanía Activa. Su primera experiencia fue en un escrache a Carlos Menem frente al hotel Presidente, pero dice que su intención es trascender la queja: "Queremos pasar a una acción más concreta". Su agrupación tiene 445 miembros activos en Facebook y reuniones propias.
Por ahora, Bustos dice que está concentrado en el 8-N. "Pensamos hacer remeras y venderlas para que la gente las lleve al cacerolazo", cuenta. Según él, "un mínimo de estrategia" es necesario. Recibe a LA NACION en la inmobiliaria de su familia en la que trabaja, en Palermo, donde siempre está conectado a Facebook y a Twitter. "En el rubro, ahora tengo tiempo", se sonríe.
Bustos, como casi todos los consultados, coincide en que decidieron verse las caras porque Internet tiene fallas. El peligro de ser operados por infiltrados oficialistas (a quienes ellos llaman "kukas") y los problemas para coordinar acciones rápidas fueron los principales factores.
El promotor de los encuentros fue Lucho Bugallo, de 31 años, oriundo de Ascensión, un pueblo rural bonaerense. Es un lazo clave de los caceroleros con dirigentes de la oposición. En Ascensión, estaba en Federación Agraria y cuando se instaló en Buenos Aires se sumó al ateneo de la Sociedad Rural. Hizo un curso en la fundación Fragua, que presidía Max Gulmanelli, actual funcionario del gobierno porteño, e integra Soy Fiscal, organización dedicada a capacitar a fiscales electorales, de la que participa el rabino Sergio Bergman. Bugallo creó Red de Encuentro Ciudadano (REC), con gente de partidos como Unión por Todos y la Coalición Cívica. Todos los martes hacen charlas en la Legislatura porteña.
De los administradores de páginas, los más representativos están divididos en dos facciones, que tienen rispideces, pero mantienen algún nexo. Para coordinar estrategias, los principales administradores tienen otros grupos que no son públicos, donde dialogan sólo ellos.
Bugallo colabora con El Cipayo (17.083 adherentes), página que es una de las referentes. Pero él no es El Cipayo, cuya identidad es un misterio. En lo que a intrigas respecta, el mundo de los ciberopositores está lleno. Identidades falsas, colaboradores secretos, acusaciones de infiltración... Hoy nada de eso importa. Todos se centran en el 8-N. Qué pasará con ellos después es otro misterio.
Marcelo Morán y Mariana Torres, (administradores de El Anti K) son los organizadores principales de las manifestaciones y se encuentran en muchos puntos en desacuerdo con el resto. Morán participó del escrache a Guillermo Moreno, un metodo que fue repudiado por varios de los otros administradores. Además tienen otras diferencas como por ejemplo están en contra de los que proponen no hablar con la prensa, de los contactos con los opositores y de quienes quieren sacar redito económico como por ejemplo con la ventas de las camisetas.
"No milito para ningún partido. Voté a la Coalición Cívica en las últimas elecciones pero me considero independiente. Pienso en cada elección a quién votar. Nadie tiene ni tendrá mi voto cautivo. Fuimos la única página que se mantuvo apartidaria en octubre, o al menos una de las pocas" dijo hace poco Torres en un texto que ella misma difundió y agregó: "No tenemos contacto con ningún opositor. Personalmente, creo que no deben subirse a la protesta. La gente no va por ellos".
Y luego sostuvo: "No tengo ningún microemprendimiento de impresión de remeras. Quiero creer que el comentario que hizo el administrador de un grupo pequeño que habló de hacer remeras, era sólo para ellos".
Que opinan
Desde la agrupación "La Yrigoyen", de origen radical, sostienen que el gobierno de Cristina Kirchner "es una dictadura que llegó con las urnas". Para ellos no hay una división de poderes sino "una propensión a ejercitar arbitrariamente el mando en beneficio de la minoría que la apoya" al Gobierno Nacional.
La agrupación "Argentina Sin Korrupción", también en diálogo con Infonews fue por la misma tesitura. Sostuvo que el gobierno de Cristina "no es una dictadura porque fue elegida democráticamente, pero se maneja como tal en su proceder", ya que "quien no piensa igual es separado, destruído, sofocado" y aseguró que la movilización "no quiere destituir pero sí frenar las malas politicas".
Organización
Es para remarcar una nota aclaratoria realizada por la pagina "Yo no vote a Kretina y Ud?" que permite ilustrar el modus operandi de estos grupos. Ante un artículo de La Nación, publicaron la siguiente salvedad. "La fecha del 8N no fue resuelta por ésta página, sino por un grupo de administradores de no menos de 15 a 20 páginas, entre las que se encuentra la nuestra" dijeron.
No es menor además la relación con los opositores como Elisa Carrió y Patricia Bullrich. Muchos de ellos lo reconocen. Como se sostuvo en un artículo de La Nación, que fue la ex funcionaria de la Alianza quien les recomendó como fecha concentrarse el 10 de diciembre. El ProPeronismo y el macrismo también tiene relación con estos grupos y muchos de ellos hasta forman parte de los mismos.
Pero el vínculo no es solo virtual. "Fui a Santa Fe y Callao y ahí tomé contacto con varios que hasta ese momento sólo conocía de Internet", contó, en una entrevista a la prensa, Marcelo Morán. Según el mismo explicó la conexión entre ellos empezó en el cacerolazo del 14 de junio. Después mantuvieron asiduamente las reuniones.
"La cosa crece y es normal que empiece a haber reuniones y charlas", le confesó a La Nación, Patricia Bullrich, quien también aseguró que "mucha gente" de su partido integra "los grupos que marcan el ritmo de las convocatorias".
Mientras sostienen periódicamente que la próxima marcha es completamente apartidaria y espontánea, lo cierto es que el día fue claramente decidido por los miembros mas influyentes de estos grupos. Es mas muchos de ellos dieron de baja a otras fechas supuestas. Las reuniones continuas y la conexión con políticos opositores claramente es la contracara que muchos no quieren ver del futuro N8.
Fuente:
Diario Registrado. http://www.diarioregistrado.
http://www.taringa.net/posts/
http://www.lanacion.com.ar/
fuente de UPPDAL
monica oporto17:57
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